Mesón de la Villa

Si buscas un lugar donde disfrutar de la auténtica cocina castellana en el corazón de Aranda de Duero, no puedes dejar de visitar el Mesón de la Villa, ubicado en C. La Sal, 3. Este restaurante de carne a la brasa se ha ganado su fama por ofrecer platos tradicionales, como los deliciosos calamares a la romana y el clásico lechazo, que no te dejarán indiferente. Con un ambiente acogedor, su comedor en el sótano te hace sentir como en un auténtico mesón castellano. Además, la ubicación en plena Plaza Mayor lo convierte en un sitio ideal para parar a almorzar o cenar después de dar un paseo por el centro.

No es de extrañar que esté calificado con un 4.3 de 5 en Restaurant Guru. Con casi 400 reseñas y un montón de fotos de platos irresistibles, la buena comida atrae tanto a locales como a visitantes. Si te animas a ir, ten en cuenta que el precio medio del menú ronda los 15,00€, perfecto para compartir unos buenos momentos con amigos o familiares. Así que, ¡prepárate para disfrutar de una experiencia gastronómica única y sabrosa en Aranda de Duero!

Dónde se encuentra el Mesón de la Villa

Si buscas un lugar para disfrutar de buena comida en Aranda de Duero, déjame contarte sobre el Mesón de la Villa. Acabamos de volver de allí un grupo de 12 amigos de Málaga y salimos más que contentos. La comida está para chuparse los dedos y el ambiente es super acogedor, como estar en casa. De hecho, la atención que recibimos fue realmente cercana; el dueño es una persona encantadora que nos hizo sentir muy bienvenidos. ¡Totalmente recomendable!

Una de las joyas del menú es, sin duda, el Cuarto Delantero de Lechazo al Horno. La carne estaba tan tierna y jugosa que fue un verdadero festín. Además, ¡tienen una morcilla que deberías probar sí o sí! A nosotros nos sirvieron rapidísimo, apenas tuvimos que esperar entre plato y plato, lo que se agradece cuando estás en buena compañía. Y si te preguntas por el precio, está más que ajustado; entre 40 y 50 euros por persona, que está muy bien para lo que ofrecen.

Una de las mejores experiencias fue cuando el dueño, Andrés, nos enseñó su bodega espectacular. Te juro que tiene siglos de historia, y escucharle hablar con tanto cariño y pasión por su trabajo fue un verdadero lujo. La bodega tiene un encanto especial, y la chica que nos la mostró también lo explicó maravillosamente bien. Sentirte como en casa en un lugar así es un gustazo, ¿no crees?

Así que, si te preguntas dónde se encuentra el Mesón de la Villa, ¡fácil! Está en C. La Sal, 3, 09400 Aranda de Duero, Burgos. Si decides pasarte, ¡te aseguro que no te vas a arrepentir!

Qué tipo de cocina ofrece el Mesón de la Villa

La verdad es que el Mesón de la Villa en Aranda de Duero nos sorprendió gratamente. Fuimos por casualidad y, ¡vaya hallazgo! Los dueños son majísimos, siempre con una sonrisa en la cara, haciendo que te sientas como en casa. La comida es simplemente excepcional; no solo es sabrosa, sino que realmente te recuerda a la cocina de toda la vida. Es cierto lo que dicen, los lugares no son solo su comida, ¡también son la gente!

Los fans del lechazo están de enhorabuena, porque aquí lo preparan de forma espectacular. Nunca había probado un asado tan bueno. Además, la carta de vinos es amplia, con opciones nacionales e internacionales que combinan a la perfección. Y hablando de vinos, si tienes la oportunidad, no te pierdas la bodega del siglo XV que tienen en el local; es realmente impresionante, con más de veintiocho mil botellas. Es como un viaje al pasado mientras disfrutas de tu cena, algo que le da un toque especial al sitio.

Claro, no todo fue perfecto. Algunos comentarios mencionan una experiencia menos que agradable con el servicio, incluso un par de visitas mencionan un ambiente un tanto 'triste'. Pero para nosotros, la atención fue buena y la comida sobresaliente. Me imagino que cada visita puede ser un mundo, y a veces, hay fallos. Pero si vas con la mente abierta y te dejas llevar por lo que hacen bien, seguro que tienes una buena experiencia.

En cuanto a la cocina del Mesón de la Villa, podríamos definirla como una comida tradicional deliciosa, donde el lechazo y la ensaladilla rusa brillan entre platos que te recuerdan a los sabores del hogar. Pero eso sí, tal vez quieras evitar aquellos menús del día que a veces parecen recordar más a un hogar de jubilados. Al final del día, si te topas con su buena atención y su ambiente acogedor, seguro que te irás con una sonrisa y con ganas de volver.

Cuáles son algunos de los platos destacados del restaurante

Y, bueno, si te pasas por el Mesón de la Villa un jueves, prepárate para disfrutar de un ambiente super tranquilo. La otra vez que fui, me encontré con que el local estaba casi vacío, lo que fue un alivio porque podías comer sin el estrés de un restaurante lleno. La dueña, realmente encantadora, se preocupa por sus clientes y eso se nota en el servicio. Me pedí el lechazo insuperable, y déjame decirte que fue un festín. También probé la ensalada verde, que estaba super bien aliñada y complementó perfecto la carne. Además, nos sorprendieron con unos aperitivos que estaban de lujo. Sin duda, un lugar al que volveremos sin dudarlo.

Por otro lado, no todo el mundo parece haber tenido una experiencia tan positiva. No puedo evitar pensar en un grupo grande que fue uno de esos días y salió bastante decepcionado. Se quejaron de que la cuenta total fue de 532€ y les llegó en un papelito con el total, pero sin desglosar nada. ¡Imagínate la cara que debieron poner! Comentaron que las croquetas estaban malas, el embutido y el jamón mal cortados, y el entrecot no resultó ser más que un plato cualquiera. ¡Y el vino! Decían que era de una añada 2021 que sabía a vinagre. Ni hablar del servicio, que dejó mucho que desear, y por eso el local estaba vacío…

Lo curioso es que, a pesar de algunas críticas disparatadas, hay gente que todavía recomienda el lugar por su lechazo exquisito. Otros mencionan el bacalao, aunque lamentablemente no todos lo encuentran recomendable. La verdad es que parece haber mucho altibajo en la calidad de la comida. Para algunos, la camarera no se mostró muy profesional y no coincidía lo que decía con lo que luego sirvieron. Así que, si decides ir, asegúrate de preguntar bien antes de pedir.

Y para responder a la última pregunta, algunos de los platos destacados del restaurante incluyen, por supuesto, el lechazo, que todo el mundo alaba por su sabor; además, la tarta de queso y la morcilla de Burgos, que son otras opciones recomendadas. Pero ojo, siempre es bueno informarse antes de pedir, especialmente en días de mucho movimiento, para evitar sorpresas. ¡Espero que tengan mejor suerte que algunos de estos comensales!

Qué es el lechazo y por qué es famoso en el Mesón de la Villa

Y bueno, ya que estamos hablando de sitios chulos, el Mesón de la Villa se lleva la palma, ¿no? Estábamos de paso por Aranda y, la verdad, ¡vaya descubrimiento hicimos! La comida fue un auténtico festín. El lechazo asado que pedimos fue simplemente espectacular; estaba jugoso y lleno de sabor. Además, no te pierdas la ensalada de escabeches, que realmente complementó la experiencia. Y cómo olvidar la amabilidad de la dueña, esa chica es un encanto y te hace sentir como en casa desde el primer momento.

Por si fuera poco, el lugar es muy acogedor, con ese toque clásico de mesones castellanos que tanto nos gusta. Y, ¡ah! No te olvides de que te invitan a visitar su bodega del siglo XV. Es un plus que no se recibe en cualquier lugar. Nos tomamos unos vinos que tienen allí; además, nos dejaron probar antes de comprar, lo que es un detalle que se agradece un montón. Al final, salimos con dos botellas en la mano. ¡No podemos esperar a volver!

Por otro lado, también escuché a algunas personas que no tuvieron tan buena experiencia. Por ejemplo, una reseña mencionaba que les resultó excesivamente caro; un grupo de cuatro personas pagó 140€ sin vino ni postres. Menos mal que nosotros no tuvimos ese problema, porque el servicio fue genial y el ambiente en el nuestro caso fue perfecto. Pero, claro, hay que tener en cuenta que cada uno tiene su opinión.

Ahora, para aquellos que no están familiarizados, el lechazo es un cordero lechal que se cocina al horno y es famoso en Aranda de Duero por su ternura y sabor. En el Mesón de la Villa, lo hacen de forma tradicional, lo que lo convierte en un plato emblemático que no te puedes perder. Así que, si alguna vez te preguntas qué es lo que hace que este mesón destaque, ¡no dudes en probar su lechazo! Sin duda, un clásico que vale la pena degustar.

Cómo es el ambiente del restaurante

Y ya te digo, Mesón de la Villa es de esos sitios que solo puedes calificar de ESPECTACULAR. De verdad, si pudiera, les daría 6 estrellas porque se lo merecen con creces. La elegancia del local y el trato que recibes desde que pones un pie en la puerta te hacen sentir como en casa, pero a la vez en un sitio especial. Si estás buscando un lugar donde disfrutar de buena comida y un ambiente acogedor, este es el lugar.

Los entrantes que probamos fueron una delicia: morcilla, jamón ibérico con huevo de oca, y las correritas de croquetas de jamón y bacalao. Y cómo se me olvida el plato estrella: el lechazo al horno. Esa cosa tan sabrosa que se deshace en la boca y que viene servido en un cuenco de barro con su etiqueta de denominación de origen; es simplemente inmejorable. Y si eres fan de las patatas y del pan de torta, aquí vas a querer meterle un buen bocado, porque tienen un sabor que recuerda a lo más auténtico de la región.

Además, la carta de vinos es excelente; hay para todos los gustos y bolsillos. Te sientas, pides un buen vino, y simplemente dejas que la experiencia hable por sí sola. Y para rematar, no olvides intentar los postres caseros. La leche frita y la torrija son una pasada, son justo lo que necesitas para cerrar con broche de oro.

¿Y el ambiente? Pues te cuento que es bastante acogedor, aunque hay críticos que dicen que tiene un aire algo antiguo. Pero yo creo que eso le da un toque especial y auténtico. Al final, esas críticas no le quitan nada a la experiencia. Hay sillas altas para que los más pequeños estén a gusto, aunque aún se echa de menos un cambiador en el baño. Pero en general, creo que es un ambiente familiar y cálido que invita a poder disfrutar de una buena comida entre amigos o en familia. Sin duda, es un lugar con el que quiero repetir y repetir.

Cuánto cuesta, en promedio, un menú en el Mesón de la Villa

La verdad es que el Mesón de la Villa es un sitio al que siempre que estás en Aranda de Duero te apetece regresar. Te digo que la comida es de cinco estrellas, así que no es de extrañar que lo recomiende a todos mis amigos. El acierto del menú del día a 15€ es de esos que no lo puedes dejar pasar, y las raciones son más que generosas. Deberías probar la carrillada, espectacular, y como postre, no te vayas sin saborear su tarta de queso, que es simplemente impresionante. Eso sí, si vas en fin de semana, ¡mejor reserva!

No todo es color de rosa, claro, hay quienes han tenido un par de malas experiencias. Algunos comentarios mencionan platos que no estaban a la altura, como el cordero, y ciertas raciones que dejaban mucho que desear. Más de uno ha salido decepcionado, como ese amigo que pagó alrededor de 100€ por dos personas y salió sin ganas ni de ver el postre. Por eso, mi recomendación es que siempre tengas una referencia del plato que pidas.

Dicho esto, lo que realmente destaca aquí es el ambiente y la atención. La bodega de vinos que tienen es espectacular, y a veces es difícil aparcar por la zona, pero sigue valiendo la pena. La combinación de un personal atento y un menú variado, incluyendo opciones vegetarianas, hace que sea un lugar ideal. Si tienes la oportunidad de visitar, ¡no dudes en hacerlo!

Y sobre el precio de un menú en el Mesón de la Villa, digamos que en promedio, puedes esperar pagar alrededor de 15-30€, dependiendo de lo que elijas. Te aseguro que además de salir satisfecho, saldrás pensando en cuándo volver.

Qué calificación tiene el Mesón de la Villa en Restaurant Guru

Y ya que estamos hablando del Mesón de la Villa, ¡qué locura! Últimamente he sentido que han cambiado de dueños o algo por el estilo, porque la experiencia se siente un poco diferente a la que recordaba de hace unos años. Empezamos pidiendo un vino, y claro, nos dijeron que solo tenían una última botella del Pago de Capellanes... En un asador de Aranda, eso es un poco raro, ¿no creéis? Me esperaba que fuese uno de los vinos más comunes y que hubiera un par de botellas en la estantería.

Y luego las bravas, madre mía... ¡había cosa que decepcionarme más! Pedimos unas, y por 8 euros casi me había imaginado que me traían el oro en forma de patatas. Pero no, eran unas patatas congeladas que hasta en la hamburguesería más cercana hacen mejores. Entre el entrecot, que aunque estaba al punto no tenía la ternura que esperábamos por el precio, sentí que no fue lo que esperábamos. Aun así, algunos de los otros platos estaban bien y no todo fue un desastre.

¡Pero no todo fue malo! Cuando estuve allí, la comida fue casera y honesta, lo que siempre se agradece. El lugar es acogedor y tiene buen ambiente. Si estás de paso y tienes que escaparte de la rutina para comer algo rico, es el sitio ideal. Aunque una vez cometí el error de no pedir lechazo, que parece ser lo que realmente merece la pena. Comprensible si eres un amante de ese plato.

Por otro lado, no puedo dejar de mencionar un servicio que dejó mucho que desear. Una vez una chica al lado decidió que quería cuatro bocadillos, y la camarera, sin más, me quitó los míos de las manos. ¡Increíble! Así que la atención puede ser un asunto delicado, dependiendo del día.

Y para ir cerrando, si te preguntas qué calificación tiene el Mesón de la Villa en Restaurant Guru, parece que no es muy brillante. La verdad es que los comentarios son bastante variados, pero he visto una calificación de 3 estrellas, lo cual refleja esa mezcla de momentos buenos y otros no tanto. En fin, si decides ir, ¡que no se te olvide probar el lechazo!

Cuántas reseñas tiene el Mesón de la Villa en Restaurant Guru

Y ya que estamos hablando del *Mesón de la Villa*, hay que reconocer que hay opiniones para todos los gustos. Por un lado, hay quienes han tenido una experiencia increíble allí. Ya sabes, esos días en que entras sin muchas expectativas y terminas disfrutando de una comida que ni te esperabas. Algunos han elogiado su atención al cliente como si fuera de otro mundo, agradeciendo la dedicación del personal. Desde un cordero tierno y crujiente hasta postres caseros que parecen salir de una cocina familiar, realmente hubo quienes no escatimaron en halagos. ¡Eso sí, asegúrate de hacer una reserva!

Por otro lado, no todo ha sido color de rosa. Hay comentarios que mencionan que, a pesar de que el trato es amable, la comida no siempre ha estado a la altura. Algunos se han quejado de porciones ridículas, como esas costillas "contadas" que parecen más una broma que un plato. También hay quienes se han quedado con ganas de más tras probar el bacalao o el ciervo, que, según dicen, no era precisamente una delicia. Y claro, el ambiente es una mezcla de lo acogedor con un toque de "mejorable".

La cuestión es que el lugar sigue siendo un punto de encuentro en Aranda de Duero y parece que tiene su propio encanto, aunque con algunos peros. ¡Y vaya si han dejado su huella! He oído que tienen unas 25 reseñas en Restaurant Guru, así que, con tanta variedad de opinión, es difícil no querer descubrirlo por uno mismo. ¡Eso sí, tal vez vayas con un par de reservas en mente, tanto para la comida como para el servicio!

Por qué es un buen lugar para almorzar o cenar después de pasear por el centro

Y si aún no has escuchado hablar del Mesón de la Villa, déjame contarte que es uno de esos sitios que simplemente debes tener guardado en tus favoritos de Google Maps. Te juro que te va a encantar. La comida es de cinco estrellas, y el precio es más que razonable, rondando entre 30 y 40 euros por persona. Desde que entras, la amabilidad del personal se siente; todos, desde el primero hasta el último, te hacen sentir como en casa. No es solo comer, es disfrutar de una experiencia completa.

Mientras esperábamos a que nos sirviesen, nos llevaron a explorar su bodega del siglo XIV. Imagínate, ¡una auténtica joya histórica en los sótanos del local! Nos pusieron unos entrantes deliciosos para hacer más llevadera la espera, así que ya sabrás lo bien que se portan. Le ponen cariño a todo lo que hacen, y eso se nota en cada plato que sale de la cocina.

Así que, después de un buen paseo por el centro, el Mesón de la Villa es un excelente lugar para detenerte y reponer fuerzas. Puedes disfrutar de un ambiente acogedor, con una comida que no solo es buena, sino también hecha con amor. Sin duda, es el sitio perfecto para relajarte, charlar y disfrutar de una comida que recordarás. ¡No te lo pierdas!

Fotografías Mesón de la Villa