
Si buscas una experiencia gastronómica única, tienes que visitar la Gastrobodega Martín Berasategui, situada en las increíbles Bodegas Yllera en Rueda, Valladolid. Este restaurante, ubicado a 20 metros bajo tierra en una bodega del siglo XV, ofrece un ambiente mágico perfecto para cualquier ocasión especial, desde cenas románticas hasta celebraciones con amigos. Con la maestría del reconocido chef español que acumula 12 estrellas Michelin, cada plato es una obra de arte que destaca ingredientes locales de la mejor calidad.
Aquí, la cocina gourmet se mezcla con una propuesta innovadora basada en la temporalidad de los ingredientes. Puedes deleitarte con delicias como la milhoja de anguila ahumada o la sorprendente corvina salvaje, todo maridado con los fantásticos vinos de la región. Al entrar en el laberinto de El Hilo de Ariadna, te embarcarás en un viaje culinario que no olvidarás. Si tienes antojo de buena comida y una experiencia diferente, este es el lugar ideal.
Horarios Gastrobodega Martín Berasategui
| Día | Hora |
|---|---|
| lunes | Cerrado |
| martes | Cerrado |
| miércoles | 13:30–17:30 |
| jueves | 13:30–17:30 |
| viernes | 13:30–17:30, 20:30–24:00 |
| sábado | 13:30–15:30, 20:30–24:00 |
| domingo | 13:30–17:30 |
El horario podría cambiar.
Mapa Ubicación Gastrobodega Martín Berasategui
Dónde se encuentra la Gastrobodega Martín Berasategui
¡Hola, amigos! ¿Alguna vez han estado en la Gastrobodega Martín Berasategui? Si no lo han hecho, ¡deberían correr a reservar! Está ubicada en la Avenida Mariano Ruiz Rodríguez, 1, en Rueda, Valladolid, y créanme, es un lugar que no se pueden perder. ¡Es una verdadera joyita!
La experiencia que vivimos allí fue simplemente fantástica. Desde el momento en que entramos, nos recibieron con una sonrisa y un ambiente súper acogedor. Pedimos de la carta y cada plato fue una sorpresa deliciosa. No hay que olvidarse de los panes y aperitivos; valen totalmente la pena, ¡quién iba a decir que unos aperitivos pudieran ser tan sorprendentes! La trucha castellana con esa base de piñones estuvo riquísima, y qué decir del lomo de ciervo, un plato de caza que tenía un sabor increíble. Y si son amantes del pescado, la corvina salvaje que sirven aquí es una maravilla, ¡preparada a la perfección!
Y para cerrar con broche de oro, probamos el postre Roca mango: tiene una textura muy buena y un punto de dulzor justo, ¡no se hace nada pesado! Ah, y si tienen la oportunidad, no duden en pedir el Yllera Sauvignon Blanc, ¡me encantó ese vino! El servicio fue de 10, con un equipo muy atento y agradable en todo momento. Un shoutout especial para Roberto, que estaba pendiente de que todo estuviera bien, y para Luis, que nos explicaba los platos de maravilla.
Lo mejor de todo es que están 20 metros bajo tierra, así que la experiencia de comer ahí es única. Y si se preguntan dónde estacionar, no se preocupen, hay muchas plazas libres y el aparcamiento es gratuito en la calle. Sin duda, este lugar está 100% recomendado y ¡estamos deseando volver! Así que ya saben, si buscan un plan para comer bien en Valladolid, la Gastrobodega es el sitio perfecto.
A qué profundidad está ubicada la Gastrobodega
Y, para seguir con lo que te contaba, la verdad es que Gastrobodega Martín Berasategui es una auténtica joya en Valladolid. Desde el jardín donde está situado, tienes un acceso bien cómodo, y el parking justo a la puerta facilita todo. Súper recomendable para cualquier persona que quiera disfrutar de una comida sin complicaciones y sin estar dando vueltas buscando un sitio donde aparcar. Además, el restaurante es totalmente accesible, porque hay ascensor para bajar y subir sin problemas. Eso sí, desde que llegas, ya sientes que va a ser una experiencia de 10 sobre 10.
El menú degustación que pedimos fue una maravilla; cada plato era una explosión de sabores que te dejaban con ganas de más. Te aseguro que no sales con hambre, ¡más bien te vas bien satisfecho! Y eso que ofrecen una variedad de opciones para todos los gustos y hasta tienen en cuenta cualquier tipo de alergia o intolerancia. Y el personal, de verdad, se merece un aplauso; fueron súper atentas y cariñosas, especialmente con mi abuelo de 85 años que se sintió como en casa. ¿Se puede pedir algo más? Mil gracias a ellos por hacer que nuestra visita fuera tan especial.
Por otro lado, he de decir que la relación calidad-precio es bastante adecuada. Si bien hay algunos detalles como el cobro del agua que pueden dejar un poco de mal sabor, el ambiente es tan acogedor que lo olvidas rápido. Nos pusieron una buena cantidad de platos, y aunque algunos son pequeños, al final sales con el estómago bien lleno. También me encantó el entorno, ya que el restaurante está 20 metros bajo tierra en las bodegas Yllera, lo que le da un aire único y un ambiente que no se encuentra en cualquier sitio.
En fin, que estoy convencido de que no será la última vez que visite la Gastrobodega. De hecho, ya estoy pensando en hacer una segunda visita y quizás explorar esa bodega que, por cierto, estaba cerrada el día de Reyes. Enhorabuena al equipo por su trabajo y, cuando vuelva, espero seguir disfrutando de esta experiencia tan deliciosa.
Qué tipo de ambiente ofrece este restaurante
El otro día estuve compartiendo una cena en la Gastrobodega Martín Berasategui y la verdad es que ¡no pudo ser mejor! A pesar de un pequeño malentendido que tuvimos al principio, el equipo se encargó de solucionarlo al instante, lo que ya dice mucho de su servicio impecable. La comida fue un verdadero espectáculo, especialmente los postres, que son de otro nivel. ¡Yo que tú, iría con mucha hambre porque las porciones son generosas y cada bocado merece ser disfrutado!
El ambiente es simplemente fantástico, con una decoración encantadora y una bodega que puedes visitar después de la comida. Nos dieron la bienvenida con una sonrisa y nos hicieron sentir como en casa, lo cual es un puntazo. La amabilidad de los camareros es digna de mención; te explican cada plato a la perfección y están atentos a cualquier necesidad, como cuando le comentamos que mi marido tiene alergias. ¡Nos adaptaron casi todo el menú degustación a su situación! ¿No es increíble? Hasta nos trajeron un bombón para celebrar nuestro aniversario, lo que fue un detalle muy genial.
Si decides probar los menús degustación, asegúrate de optar por el corto, porque no te vas a arrepentir. La calidad es excepcional, y el precio, que ronda entre 60 y 100 euros por persona, es totalmente asumible para lo que obtienes. La bodega en sí es chulísima y con mucho encanto, lo que añade un toque especial a la experiencia culinaria. Además, hay plazas de aparcamiento gratuitas justo en la puerta, así que no te preocupes por eso.
En cuanto al ambiente, lo definiría como elegante pero acogedor, ideal para una cena especial o incluso para darte un capricho. Es un lugar ideal para disfrutar de una experiencia gastronómica de alta calidad, sin perder ese toque cercano y amable que te hace sentir como en familia. Así que si buscas una cena con un ambiente agradable y un servicio magnífico, definitivamente Gastrobodega Martín Berasategui es tu sitio. ¡No te lo pierdas!
Quién es el chef responsable de la cocina en la Gastrobodega Martín Berasategui
La verdad es que no tengo palabras para describir lo increíble que es la Gastrobodega Martín Berasategui. Estaba de vacaciones en Valladolid y tenía muchas ganas de conocer este lugar. Desde el mismo momento en que bajé varios metros en el ascensor y se abrió la puerta, me sentí como si viajara al siglo XVI. El ambiente es mágico, y a pesar del calor insoportable del verano, allí abajo se está en la gloria. Si estás buscando un sitio digno de visita, definitivamente tienes que incluir esta gastrobodega en tu ruta.
Espectacular es quizás la mejor palabra para describir la comida. Cada plato es una obra de arte que va superando al anterior. Optamos por el menú degustación y vaya acierto, porque cada bocado era mejor que el anterior. Además, el servicio fue de 10, ¡no hay duda! Los camareros tienen una habilidad especial para hacerte disfrutar el plato antes de que lo pruebes; te lo describen de tal manera que ya lo saboreas con solo escucharles. Y eso es algo que realmente marca la diferencia en la experiencia.
Y hablando del ambiente, ¡la bodega es simplemente preciosa! Hicimos previamente una visita a las instalaciones, y les aseguro que es 100% recomendable. Este lugar es un edén gastronómico, con productos de calidad y una atención al detalle que te hace sentir como en casa. Me encanta la idea de que puedes disfrutar de una comida de temporada sin la sensación de haberte llenado en exceso. Aquí, la cantidad está en su punto perfecto, lo que significa que puedes disfrutar al máximo de la experiencia.
Y para aquellos que aún se preguntan, el chef responsable de la cocina es Nauzet. Es realmente un maestro en su arte y, junto a su equipo, hacen que cada visita sea memorable. Salimos tan felices y con ganas de volver a Valladolid solo para repetir en esta gastrobodega. No lo pienses más, ¡debes vivirlo tú mismo!
Cuántas estrellas Michelin ha acumulado Martín Berasategui
Y bueno, si estás buscando un lugar para impresionar a alguien o simplemente darte un buen capricho, la Gastrobodega Martín Berasategui es el sitio ideal. Desde que llegas, es todo un espectáculo: entras a través de una nave singular, ya sea por el ascensor o bajando unas escaleras que te llevan a la profundidad de la bodega. La sala del restaurante en sí está a unos 18 metros de profundidad, lo que le da un aire especial y único. Te vas a sentir como si estuvieras en un lugar exclusivo, bien lejos del bullicio habitual.
Una vez dentro, verás que la decoración es modernísima y todo está increíblemente cuidado. La bodega tiene muchísimas áreas interesantes, como salas de catas y de barricas. Si no has tenido la oportunidad de hacer un recorrido por estas estancias, te lo recomiendo, ¡es una experiencia que vale la pena! El ambiente se siente acogedor y el servicio es simplemente espectacular. El personal es súper atento y profesional, te van guiando a través de la experiencia gastronómica como si te estuvieran contando un cuento, explicando cada plato con pasión y detalle.
Optamos por pedir platos sueltos en lugar del menú degustación, pero la próxima vez definitivamente me atreveré con el menú completo. Los postres son de otro nivel, así que asegúrate de dejar un huequito para ellos, ¡porque son buenísimos y muy originales! Además, si tienes alguna restricción alimentaria, te aseguro que aquí se adaptan sin problema, lo que siempre es un extra que se agradece.
Ah, y si te estás preguntando por las estrellas Michelin, Martín Berasategui acumula un total de siete estrellas entre sus distintos restaurantes, así que puedes tener la certeza de que aquí la calidad está garantizada. Sin duda, es un lugarazo que querrás visitar más de una vez. ¡Volveremos sin dudarlo!
Qué tipo de ocasiones son ideales para visitar la Gastrobodega
¡Déjame contarte sobre un lugar que me dejó impresionado! La Gastrobodega Martín Berasategui es una joya oculta, ubicada en Av. Mariano Ruiz Rodríguez, 1, en Rueda, Valladolid. La verdad, el sitio tiene un ambiente increíble. Es un restaurante que parece más un pequeño refugio subterráneo, ¡20 metros bajo tierra! El entorno es acogedor y con una decoración que invita a quedarse horas disfrutando de la comida y, por supuesto, de una buena charla. Y, si te gusta disfrutar de la buena mesa, ¡este es tu lugar!
Te cuento que probé el menú degustación, que cuesta alrededor de 84 euros más bebidas. Lo único que me sorprendió un poco fue la escasez de platos cárnicos. En un lugar como Castilla y León, esperaba algún lechazo o cochinillo en el recorrido, pero solo había un pichón. Aún así, quiero que sepas que todo lo demás estaba delicioso y muy bien presentado. ¡Los cuatro tipos de pan de hogaza que sirven son excepcionales! Imagínate disfrutar de cada bocado mientras te atienden unos camareros que son una maravilla, siempre atentos pero sin sensación de que te están vigilando.
En lo que respecta al servicio, debo decir que es de 5 estrellas. Los camareros conocen los platos y siempre tienen una recomendación acertada. Te sientes muy bienvenido. Además, si te consideras un amante de los postres, la torrija caramelizada y la crema de almendra con helado de tiramisú no te los puedes perder, ¡de verdad! Aunque hubo un par de opiniones de gente que sentía que el menú tenía altibajos, mi experiencia fue bastante satisfactoria, y el ambiente también cuenta mucho.
Ahora, ¿te has preguntado para qué tipo de ocasiones es ideal visitar el Gastrobodega? Yo creo que es perfecto para celebraciones especiales, como un aniversario o una reunión familiar. También es un excelente lugar para impresionar a alguien en una cita, ya que la comida y el servicio son de primera, y el ambiente íntimo ayuda a que la conversación fluya. No olvides reservar, porque aunque el aparcamiento es fácil y gratuito, la demanda a veces puede ser alta. ¡Así que ya sabes, si quieres vivir una experiencia única, no dudes en darte una vuelta por aquí!
Cuáles son algunos ejemplos de platos destacados en el menú
¡Y no puedo dejar de hablar de la experiencia mágica que vivimos en la Gastrobodega Martín Berasategui! Desde que cruzamos la puerta, el ambiente nos envolvió, con ese toque histórico de las antiguas bodegas de Yllera. La decoración es un verdadero viaje en el tiempo, pero no se queda ahí, ya que el trato del personal es simplemente impecable. Roberto y su equipo son unas joyas; conseguimos sentirnos como en casa en cada instante. Aplausos para ellos, de verdad.
Optamos por el menú degustación, y déjame decirte que fue una explosión de sabores. Cada plato era un deleite que hacía querer más. Desde los entrantes de bocado hasta los postres, todo estuvo a otro nivel. No hay manera de describir lo bien que jugaron con los ingredientes; cada bocado era una sorpresa. Y, sí, el precio está en torno a los 90-100 € por persona, pero créeme, no te arrepentirás. Es el tipo de experiencia que hay que regalarse de vez en cuando, sobre todo si estás celebrando algo especial, como hicimos nosotros en nuestro aniversario. ¡Definitivamente volveremos!
Sobre las delicias del menú, hay que mencionar la degustación de mantequillas y aceites que precede a los platos principales. ¿Y los postres? ¡Oh, no tienen comparación! Los sabores son tan elaborados que no sabrás cuál elegir. Además, la atención del metre al explicarnos cada plato hizo que la experiencia fuera aún más enriquecedora. Así que si tienes la oportunidad de ir, no dudes en experimentar todos esos sabores. ¡Ya estoy deseando regresar!
Qué enfoque tiene la Gastrobodega en cuanto a la cocina y los ingredientes
Y ya que estamos hablando de la Gastrobodega Martín Berasategui, quiero contarte sobre mi última visita. La verdad es que es un lugar que siempre me deja con la boca abierta. ¡5 estrellas por todas partes! No solo el espacio es precioso y bien decorado, sino que el servicio también es impecable. El personal es super educado y siempre se nota que están pendientes de cada detalle. Enhorabuena a todo el equipo por su increíble atención, de verdad.
Ya sabes que yo siempre apuesto por el menú degustación, y esta vez fue un acierto total. Cada plato estaba exquisito, y aunque salí rodando de lo lleno que estaba, ¡valió cada bocado! No puedo dejar de mencionar que los precios de cosas como el café, el agua y las copas de vino son más que razonables, sobre todo comparados con otros sitios donde a veces te clavan. Con esas sorpresas agradables, claro que repetiremos sin duda.
En cuanto a los sabores, es impresionante cómo logran equilibrar todo en cada plato. La ensalada de caza fue de otro mundo, y las croquetas, ¡qué delicia! Son tan melosas que te hacen querer pedir más. Y ni hablar de la chuleta, que estaba en su punto justo. La verdad, estoy contando las horas para volver, porque la comida siempre me deja con ganas de más.
Aunque tengo que reconocer que en mi tercer viaje, el menú degustación no cumplió exactamente las expectativas que tenía en comparación con años anteriores. No me malinterpretes, el servicio fue, como siempre, de 10 y el ambiente es super agradable, pero algunos platos no brillaron tanto como esperaba. Especialmente con ese toque diferenciador que esperas de un lugar con el nombre de Berasategui. Pero aún así, nada que objetar al entorno, la bodega es muy digna de visita.
Hablando de la cocina, la Gastrobodega tiene un enfoque interesante. Se centran en utilizar productos de la región, como el queso de Valdeón y miel de Tiedra, lo cual es un gran punto a favor. Aunque algunos platos pueden parecer un poco “etiquetados” semánticamente, vale la pena recordar que el objetivo es hacer bien lo "sencillo". Total, que si bien no hay alardes de chef estrella en cada bocado, la experiencia culinaria sigue siendo sólida. Así que, quien visite la Gastrobodega se llevará a casa un buen sabor de boca, sin duda.
Qué significa la "temporalidad de los ingredientes" en el contexto del restaurante
Y hablando de experiencias culinarias, no puedo dejar de mencionar la Gastrobodega Martín Berasategui. Situada en Avenida Mariano Ruiz Rodríguez, 1, 47490 Rueda, en Valladolid, es uno de esos lugares que te roban el corazón. Desde que entras, la atmósfera es acogedora y el equipo es super amable. La sonrisa del staff te hace sentir como en casa, ¿no crees? Y aunque no soy un experto, se nota que aquí tienen un enfoque bien diferente a la hora de preparar los platos.
Hablemos de la comida, porque eso es lo que realmente importa. Si te gustan los sabores intensos y bien combinados, este es tu sitio. Lo mejor es que utilizan ingredientes de temporada, así que las cartas varían constantemente. Nunca sabes qué delicia te vas a encontrar la próxima vez, ¡y eso es emocionante! Te aseguro que cada bocado es una fiesta para el paladar; esa fusión de sabores frescos y cuidados te hace querer volver una y otra vez.
Y no puedo dejar de mencionar esos maridajes perfectos que hacen con los vinos locales. Es como si cada plato estuviera hecho a medida para funcionar a la perfección con la bebida que eliges. Vas a sentir que cada sorbo y cada bocado se complementan de una manera que, a veces, hasta parece mágica. Además, el lugar tiene ese aire chic pero relajado que invita a quedarte a disfrutar un rato más.
Cuando hablamos de temporalidad de los ingredientes, nos referimos a que aquí se esfuerzan por usar solo lo que está en su mejor momento, lo que significa que siempre será fresco y de calidad. Eso impacta no solo en el sabor, sino también en la sostenibilidad. Al elegir productos de temporada, apoyan a los productores locales y reducen la huella de carbono. Así que cada vez que pidas algo, puedes sentirte bien al saber que estás disfrutando de lo mejor de la tierra en su justo momento. ¡Un plan redondo, sin duda!








