
El Chiringuito del Camino es un restaurante encantador ubicado en Plaza San Telmo, 2 en Frómista, Palencia. Con su decoración sencilla y una amplia terraza que da al camino, este lugar no solo es fácil de encontrar, sino también perfecto para relajarte después de un día de exploración. Además, cuenta con un buen aparcamiento, lo que siempre es un plus. Aquí, los platos del menú realmente destacan, con un costillar ibérico que te dejará sin palabras y unas natillas caseras que son pura delicia (sin galleta, ¡así que prepárate para disfrutar!).
Pero la comida no es lo único que brilla en El Chiringuito. El ambiente es cálido y acogedor, y el jefe del lugar es un profesional que te atenderá como si fueras parte de su familia, siempre listo para recomendarte lo mejor del menú. Con una calificación impresionante de 4.7 en Restaurant Guru y un montón de reseñas positivas, es un sitio que definitivamente hay que visitar. Ideal para peregrinos y turistas que quieren disfrutar de la cocina mediterránea en un marco excepcional.
Horarios El Chiringuito del Camino
| Día | Hora |
|---|---|
| lunes | Cerrado |
| martes | 18:30–22:00 |
| miércoles | 18:30–22:00 |
| jueves | 18:30–22:00 |
| viernes | 18:30–22:00 |
| sábado | Cerrado |
| domingo | 14:00–16:15 |
El horario podría cambiar.
Mapa Ubicación El Chiringuito del Camino
Dónde está ubicado El Chiringuito del Camino
¡Hola, amigos! Si alguna vez se encuentran por Frómista, Palencia, no pueden dejar de visitar El Chiringuito del Camino, un restaurante que se lleva 5 estrellas. Este lugar no es solo otro sitio para comer, es una experiencia que te hará sentir como en casa. Con un ambiente acogedor, y ese toque especial de una chimenea que te abraza con su calidez, aquí te van a recibir como si fueras de la familia.
Nosotros fuimos un par de amigos y nos metimos un festín que nos dejó encantados. Tenían un menú limitado, pero [no se dejen engañar](#), los platos son potentes y generosos. Elegimos las costillas con barbacoa, que estaban para chuparse los dedos, y la morcilla de Burgos con patatas y huevos fritos. ¡No puedo ni describir lo buena que estaba! Además, para los vegetarianos, tienen un plato muy rico con verduras a la parrilla. Todo hecho al momento y en menos de 10 minutos, ¡no se puede pedir más!
La atención es otro punto fuerte. José, el chico que nos atendió, fue un verdadero encanto. Siempre con una sonrisa y muy atento a lo que necesitábamos. El lugar es muy limpio y cuidado, así que se nota que se preocupan por los detalles. Ah, y si van en grupo, perfecto, porque el sitio acepta grupos de todos los tamaños. ¡Y para los que llevan niños, no hay problema! Se sienten bienvenidos, por supuesto.
Y si pensabas en el aparcamiento, no te preocupes: hay varias plazas gratuitas alrededor del restaurante. Eso sí, ¡mejor reserven antes porque se llena rápido! Así que ya sabes, si andas buscando un lugar donde disfrutar de buena comida y una buena atención, El Chiringuito del Camino es tu sitio. En resumen, está en Pl. San Telmo, 2, 34440 Frómista, Palencia. ¡No se lo pierdan!
Qué tipo de restaurante es El Chiringuito del Camino
Y, la verdad, El Chiringuito del Camino es un sitio que tienes que probar sí o sí. Cinco estrellas, amigo. Desde el momento en que llegas, te das cuenta de que aquí hay un ambiente fantástico. Te recibirá Jose, que es el alma del lugar. El tipo tiene una pasión por los platos de la carta que es contagiosa; te enamoras de lo que ofrece. Es un placer escucharle hablar con tanto cariño de cada opción. Te garantiza que todo lo que sirven está recién hecho, ni un plato recalentado en la cocina, ¡y eso se nota desde el primer bocado!
Las raciones son abundantes y la calidad de la materia prima es simplemente excelente. Y lo mejor de todo: ¡los precios son una ganga! Por entre 10 y 20 euros por persona, puedes disfrutar de una comida que hace que te olvides de cualquier dieta. Eso sí, si decides reservar, asegúrate de confirmar tu asistencia, porque el aforo es limitado y no querrás perderte esta experiencia única. Ah, por cierto, si viajas con tu peludo, aquí son bienvenidos, ¡ni se imaginan lo bien que tratan a las mascotas!
El ambiente es super acogedor, con una mesa grande para los peregrinos, donde van sirviendo a medida que llegan. Imagínate, un grupo de amigos, algo de charla y un plato de costillas espectaculares en la mesa. Comida deliciosa, servicio rapidísimo y un equipo que sabe cómo hacerte sentir como en casa. Si preguntas qué tipo de restaurante es El Chiringuito del Camino, te diré que es ese lugar donde el buen comer se combina con el buen trato, donde la comida casera y el amor por lo que hacen se reflejan en cada plato. Y eso lo hace un sitio altamente recomendable. ¡Tienes que ir y vivirlo!
Cuál es la dirección exacta de El Chiringuito del Camino en Frómista
Y, ¿qué te digo sobre El Chiringuito del Camino? Este lugar me lo recomendaron y, la verdad, no tengo más que cosas buenas que decir. ¡Es un clásico en Frómista! No sé cómo lo hacen, pero logran ofrecer un menú exquisito con cuatro opciones que nunca dejan de sorprender. Te aseguro que la cantidad es más que abundante, y la calidad es impresionante para el precio, que no supera de 10 a 20 euros por persona. Si buscas un sitio donde te traten con amabilidad, este es el indicado.
La verdad, el ambiente es de esos que te hacen sentir como en casa. El encargado siempre está atento, lo que hace que la experiencia sea aún más agradable. Y hablando de la comida, si vas, no puedes dejar pasar las costillas en salsa barbacoa, ¡son absolutamente espectaculares! La morcilla y el arroz con leche tampoco se quedan atrás. No sé si alguna vez te has topado con un lugar donde todo está tan bien preparado y fresco. Definitivamente, se siente que todo se hace con cariño.
Cenamos allí como parte de la celebración del cumpleaños de un amigo, y la comida nos dejó a todos impresionados. Las costillas de cerdo y la ensalada de Frómista fueron un acierto total, con porciones generosas que, honestamente, son un festín. Y lo mejor de todo, el dueño se tomó el tiempo de hacer una pequeña celebración con nosotros. ¡Qué detalle! Eso es lo que eleva un restaurante, ¿verdad?
Si por alguna razón se te pasan las expectativas, no olvides que también puedes disfrutar de tapas y un menú a 16 euros. Nos sorprendió un poco que el agua de la casa era del grifo, pero todo se compensó con la calidad de la comida. Por ahí leí que algunos manteles podrían mejorar, pero en general, el ambiente es super cómodo. El Chiringuito del Camino es de esos lugares que no te puedes perder si pasas por Frómista.
Y, por cierto, si te preguntas dónde lo encuentras, está en Pl. San Telmo, 2, 34440 Frómista, Palencia. Es fácil de localizar, y ¡te prometo que vale la pena la visita!
Qué características tiene la terraza del restaurante
Y así, cuando pensabas que ya lo habías visto todo en tu ruta por el Camino, te encuentras con El Chiringuito del Camino, un lugar que realmente merece la pena. Es una joyita escondida en Pl. San Telmo, 2, 34440 Frómista, Palencia. La primera impresión siempre es clave, y aquí, desde el momento en que entras, te das cuenta de que has dado en el clavo. La amabilidad de José y Andrea es contagiosa; son unos cracks, siempre dispuestos a hacerte sentir como en casa, ¡y eso es algo que realmente se agradece tras una larga caminata!
Hablemos un poco más de la comida, porque es de esas cosas que te hacen decir “necesito volver”. El menú del peregrino a 16,50 € es una opción más que generosa y bien elaborada. Pero si quieres algo que te haga sonreír de felicidad, tienes que probar las costillas espectaculares. Tienen un sabor increíble, y en comparación con lo que puedes comer en otros sitios, aquí no te quedas con hambre gracias a las raciones abundantes. Y ni hablar de la parrillada de verduras y la morcilla con huevos fritos; son platos que te dejarán queriendo más. En cuanto a precios, con 10-20 € por persona puedes salir más que satisfecho.
Es todo un lujo saber que, tras una larga jornada, puedes llegar a un lugar donde la comida es exquisita y no te tienen esperando horas. Alicia, que también pasó por allí, menciona que su servicio es rápido y eficiente, y cuando llegamos tarde al albergue, Jose se aseguró de que tuviéramos tiempo de sobra para cenar. Esa atención personalizada hace que quieras volver, sin duda.
Y si estás planeando una visita, no te preocupes por el parking, que hay muchas plazas libres y el aparcamientos es gratuito. Y si te apetece disfrutar del aire libre, la terraza del restaurante es acogedora y perfecta para disfrutar de una comida al sol o de una fresca cena. Así que, caminantes, ciclistas o visitantes en general, este es un sitio definitivamente imprescindible si pasáis cerca de Frómista. ¡No se lo pierdan!
Es fácil encontrar El Chiringuito del Camino
Y, ¡vaya, El Chiringuito del Camino es el lugar perfecto para parar en Frómista! Si alguna vez pasas por aquí, no te lo puedes perder. José, el dueño, se merece un aplauso, porque es un auténtico encanto. Por no decir que la comida es espectacular. Yo diría que es una de esas paradas obligatorias durante el Camino de Santiago. Entre sus costillas a la brasa con esa salsa BBQ casera, ¡te olvidas de todas tus preocupaciones! La gente que entra sale con una sonrisa de oreja a oreja, y eso da mucha buena vibra.
El ambiente, además, es súper acogedor, como si estuvieras comiendo en casa de tu mejor amigo, pero con un toque de arte en las paredes. La atención es de 10, y eso que fuimos un grupo grande para celebrar un cumpleaños, ¡y José nos trató como si fuéramos familia! Todo el mundo se fue feliz después de probar la sopa castellana, las costillas, y hasta la morcilla con huevos. ¡No sé si es el sabor que te conquista o el estilo tan humano y familiar que tienen! Sin duda, cinco estrellas bien merecidas.
Y si piensas en el precio, ¡ni te preocupes! Comimos por unos 10-20 euros por persona, lo cual es un chollo para todo lo que traen a la mesa. Si al final de la noche acabas con un chupito de la casa, puedes dar gracias al cielo por haber encontrado un sitio así. Solo puedo decir que volveremos sin pensarlo dos veces, y espero que su proyecto de albergue de peregrinos se haga realidad porque se lo merecen.
Ahora, si te preguntas si es fácil encontrar El Chiringuito del Camino, la respuesta es un sí rotundo. Está en Pl. San Telmo, 2, en el corazón de Frómista. Así que, ¡sin excusas! Si andas por aquí, no dudes en hacer una visita, que este lugar es pura magia y buen rollo.
Hay aparcamiento disponible en El Chiringuito del Camino
Y ya que hablamos de El Chiringuito del Camino, no puedo dejar de mencionar lo bien que comimos allí. ¡Un acierto total! La variedad del menú es estupenda, con opciones que van desde morcilla hasta costillas, pasando por un plato vegetariano que está de maravilla. La calidad y cantidad son más que suficientes, y lo mejor, ¡sin que tengas que esperar! Todo esto en un ambiente muy cómodo. La atención de José, el anfitrión, es de primera; sin duda, te hace sentir como en casa.
Y si buscas algo dulce después de disfrutar de esos platos, el arroz con leche es todo un clásico que no puedes dejar pasar. Créeme, es de esos postres que te hacen cerrar los ojos y disfrutar de cada bocado, ¡una delicia! Las costillas y la morcilla son altamente recomendables, ¡todo el mundo habla de lo buenas que están! ¡Y las papas bravas de Andy son una verdadera joya! Su salsa te transporta a México, algo que no esperas en un lugar como este, pero que hace todo aún más especial.
Definitivamente, este lugar se ha convertido en una de las mejores sorpresas del camino. La calidad de los productos y cómo los elaboran es impresionante. Aunque la carta es corta, cada plato está bien pensado y ejecutado con mucho cuidado. Y si buscas un lugar donde los peregrinos se sientan a gusto, este sitio tiene un ambiente que lo favorece mucho. ¡Te aseguro que volverás!
Ahora, si te preguntas por el aparcamiento, aunque yo no tengo información específica sobre eso, lo que sí sé es que muchas veces, en lugares como Frómista, suele haber opciones cerca. Pero lo mejor sería que llegues con la idea de disfrutar y dejar el coche un poco más alejado si es necesario. ¡Así tendrás más oportunidad de caminar por esa hermosa zona!
Qué platos destacan en el menú del restaurante
Y hablando del Chiringuito del Camino, si hay algo que destaca, son las costillas a la brasa. No sé tú, pero para mí, después de un día caminando, son una verdadera delicia. Te aseguro que probé un medio costillar y no solo estaba jugoso y en su punto, sino que venía acompañado de salsa barbacoa que lo hacía aún más irresistible. Por 8 euros te llenas y no te quedas con ganas de más. Además, el ambiente es muy acogedor, ¡ideal para relajarte tras una larga jornada de peregrinaje!
Y no puedo dejar de mencionar lo genial que es charlar con Andy y Jose. Tienen una forma de hacerte sentir como en casa y eso se agradece muchísimo. La amabilidad que exhiben al recibir a los peregrinos es realmente una joya en el camino. Desde que llegas, te envuelven en buena energía. ¡Un diez para ellos! Honestamente, si estás pensando en parar a cenar, no lo dudes.
El servicio también es de cinco estrellas. La chef, muy simpática y, aunque es boliviana, se ha sabido adaptar a la perfección a los gustos del lugar. El hecho de que ofrezcan un menú vegetariano también es un gran detalle que hace que todos se sientan bienvenidos. La comida, en general, es un festival de sabor. Lo que más se comenta son las hamburguesas y, por supuesto, las costillas espectaculares que, sinceramente, son un must para cualquier visitante.
Así que, si pasas por Frómista, no dejes de probar el plato fromista. Es una experiencia que combina un entorno agradable, un servicio excepcional y una comida deliciosa. En definitiva, el Chiringuito del Camino debería ser una parada obligatoria en tu ruta. ¡Porque después de todo el esfuerzo, bien merecido tienes un buen banquete!
Qué hace especial al costillar ibérico de El Chiringuito
Y bueno, como te decía, El Chiringuito del Camino, en Pl. San Telmo, no se queda exento de opiniones variadas. La verdad es que si buscas un servicio amable, aquí lo tienen. Jose, por ejemplo, es un encanto. Le sacamos el sombrero a ese tipo que se esfuerza por atender a los peregrinos, incluso cuando el lugar está a tope. Aunque, tal como nos pasó a unas amigas, hay que esperar un ratito. Pero ojo, que vale la pena. La comida de ese día fue de 10, y esos platos de costillas, espectaculares, junto con una buena dosis de morcilla con huevos fritos, hacen la experiencia bastante sabrosa.
Sin embargo, no todo es perfecto, y es que hay quien no ha tenido la misma suerte. Te cuento que varias personas han salido desencantadas por la calidad de la comida, sobre todo porque mencionan que las costillas no son frescas y, peor aún, son de paquete. Un detalle que, sinceramente, no suena nada bien. El servicio puede ser bueno, pero si la comida no acompaña, la experiencia se va al traste. Además, con precios que rondan entre 10-20 €, uno espera algo más que un plato de compromiso, ¿no? Esa combinación de un buen trato pero una comida que apenas cumple es una lástima, la verdad.
Ahora, pasando a la pregunta que siempre está en el aire: ¿qué hace especial al costillar ibérico de El Chiringuito? Hay que decir que, pese a las críticas, hay quienes lo han disfrutado bastante. Lo bueno de ese plato, cuando se hace bien, es que las costillas son tiernas y tienen un sabor que, si son frescas, pueden ser espectaculares. Sin embargo, si sirven solo lo que viene de un paquete, se pierde esa chispa que todos esperamos. En fin, si vas a El Chiringuito, tal vez deberías preguntar primero por la frescura de las costillas antes de lanzarte a pedir. ¡Así no te llevas sorpresas!
Cómo son las natillas caseras servidas en el restaurante
Y hablando de lugares en Frómista que no te puedes perder, ¡tienes que probar El Chiringuito del Camino! Este restaurante ha ido ganándose su fama a pulso, y no es para menos. Con 4 estrellas de valoración, la experiencia aquí es realmente excelente, especialmente si optas por los menús de peregrinos. Te aseguro que no te decepcionarán; tienen opciones para todos los paladares y, lo mejor de todo, ¡el trato es súper cordial! El personal es muy ameno, así que sientes que estás en casa desde el primer momento.
Una de las cosas que más me gusta de este sitio es la variedad de ambientes que ofrecen. Puedes disfrutar de tu comida en la terraza, que es perfecta para esos días soleados, o si prefieres un ambiente más acogedor, tienen un comedor y un bar que son ideales para relajarte. Sea cual sea tu elección, la atmósfera es muy agradable y siempre se respira ese aire de camaradería que tanto caracteriza a los lugares de paso.
Y si te preguntas cómo son las natillas caseras servidas en el restaurante, déjame decirte que son una auténtica delicia. Imagínate un postre cremoso y suave, hecho con amor, que te hará sentir como si estuvieras en la cocina de la abuela. Perfecto para cerrar con broche de oro una comida deliciosa. Así que ya sabes, si pasas por allí, ¡no te olvides de probarlas! Te aseguro que te van a dejar con ganas de más.








