
Si andas por Lario, León, no te puedes perder el Restaurante La Era, situado en la Calle Real, 4. Este lugar es conocido por su excelente trato y calidad en la comida, todo de la mano de Tino, el propietario, que se asegura de que cada cliente se sienta como en casa. El menú, incluso los domingos, es espectacular y el precio es súper ajustado, lo que lo convierte en una opción ideal para disfrutar de una buena cena o comida sin romper el banco.
Además de la oferta culinaria, este sitio también cuenta con una casa rural para hospedarse, donde encontrarás camas muy cómodas y un desayuno top para empezar bien el día. Con una calificación de 4.2 de 5 en Restaurant Guru y más de 600 reseñas, es un lugar que se ha ganado el reconocimiento de los visitantes. Así que si buscas una experiencia de gastronomía heroica en un ambiente acogedor y auténtico, La Era es sin duda tu sitio.
Horarios Restaurante La Era
| Día | Hora |
|---|---|
| lunes | 8:30–24:00 |
| martes | 8:30–24:00 |
| miércoles | 8:30–24:00 |
| jueves | 8:30–24:00 |
| viernes | 8:30–24:00 |
| sábado | 8:30–24:00 |
| domingo | 8:30–24:00 |
El horario podría cambiar.
Mapa Ubicación Restaurante La Era
Dónde se encuentra el Restaurante La Era
¡Hola, grupo! Si están buscando un lugar para comer maravillosamente bien, tienen que visitar el Restaurante La Era en Calle Real, 4, 24995 Lario, León. Estuvimos allí cinco días y, sinceramente, fue una experiencia increíble. Desde los desayunos hasta las cenas, todo lo que probamos estaba riquísimo. ¡El trato de Tino es excepcional! Se siente como si estuvieras en casa, y el personal en general es de lo más amable y servicial.
La zona donde está ubicado el restaurante es preciosa. Si buscan un lugar con un ambiente acogedor y familiar, este es el sitio perfecto. Ofrecen un menú del día que, por solo 14€, es espectacular y tiene mucha variedad. Las raciones son generosas y, para rematar, nos atendió una señora encantadora que realmente se preocupaba porque estuviéramos bien. Además, ¡nos regalaron una botella de agua, un detalle que siempre se agradece!
He escuchado a muchos amigos que han ido a cenar allí y todos están de acuerdo: la comida casera es de diez. No solo eso, sino que el entorno es ideal para hacer una parada rápida si están en ruta. Te hace sentir como en familia, y eso es invaluable cuando estás viajando. Sin duda, el restaurante La Era tiene un servicio de 5 estrellas.
Y para rematar, la gestión es impecable, tanto en el restaurante como en la casa rural que tienen. Si necesitan un buen descanso, no duden en alojarse allí. La relación calidad-precio es fantástica y ¡ya se armó el plan! Así que no lo piensen más, ¡les prometo que van a querer volver! Así que, ya saben, el Restaurante La Era está en Calle Real, 4, 24995 Lario, León, ¡y les espera con los brazos abiertos! ️✨
Cuál es la dirección exacta del restaurante
Y hablando de La Era, ¡qué gran descubrimiento! La verdad es que hemos salido súper satisfechos. Cuando encuentras un lugar con buena comida, un trato impecable y un precio más que razonable, es para celebrarlo, ¿no? Todos los postres son caseros y deliciosos, y ya sabes que siempre tengo un espacio en mi estómago para algo dulce. De verdad, ¡muy recomendable! Si buscas un sitio donde el ambiente sea tan acogedor como la comida, este es el lugar.
Recuerdo que en nuestro viaje en moto hicimos una parada y fue una de las mejores decisiones. La comida estaba excepcional, y la cocinera era súper simpática. En un viaje, esos pequeños momentos son los que realmente marcan la diferencia. Te queda la sensación de haber hecho una buena elección, y sin duda, al volver por esa zona, La Era será nuestra primera opción.
No solo me quedé a comer, también decidí pasar una noche por ahí. Y chico, el dueño fue genial. Nos contó que además del restaurante tienen unas habitaciones, ¡y vaya que son cómodas! La cena en La Era fue un verdadero festín: probé la ensalada de ventresca y un chuletón premium que estaba de escándalo. El postre, la tarta de mil hojas, era tan casera que casi me siento en casa. La atención es otro punto a destacar; las camareras son muy agradables y siempre están pendientes de ti. El desayuno al día siguiente no se quedó atrás, unas tostadas con pan de pueblo y café con bizcocho casero… ¡Eso sí que es empezar bien el día! Aunque el zumo era de bote, ¡el trato fue tan bueno que eso se perdona fácilmente!
La dirección exacta de La Era es Calle Real, 4, 24995 Lario, León. Así que si te decides a ir, ya sabes dónde buscar. ¡Te prometo que no te arrepentirás!
Quién es el propietario del Restaurante La Era
Así que, aquí te cuento sobre el Restaurante La Era, que se encuentra en la Calle Real, 4, en Lario, León. La verdad, llegamos con ganas de buen rollo, pero el ambiente se tornó un poco... complicado. La comida, por cierto, está bastante buena, aunque las raciones son más bien escasas. Te imaginas, ¿no? Con tanto nombre y renombre, uno espera que te sirvan un festín, pero te vas con hambre. Y ya ni hablemos del servicio, que es un poco desastroso. En un momento, la camarera se ausentó a mitad de recitar el menú, y cuando regresó, uno ya estaba perdido y dudando entre lo que le apetecía. ¡Un horror!
A pesar de esos tropiezos, hay que admitir que el pueblo tiene mucho encanto. A nosotros nos gustó el ambiente familiar y acogedor, ideal si solo buscas unas cañas y picoteo. El restaurante tiene ese toque antiguo simpático que le da personalidad. La comida es muy casera y deliciosa, utilizando materia prima local, lo que siempre es un punto a favor. Los precios son buenos, así que si te pasa como a nosotros y decides quedarte a cenar, al menos estás comiendo algo de calidad por lo que pagas.
Recuerdo que, al llamar para reservar, la actitud del dueño estuvo un poco... arisca. A veces, parece que el trato al cliente se olvida, ¿verdad? Al llegar, todo eran caras largas y tardaron en atendernos, y ese ninguneo de que desde fuera te digan que esperes y que ya te dirán... ¡madre mía! Pero bueno, con paciencia, la comida llegó y, a pesar de las incidencias, los postres caseros resultaron ser un gran acierto. Si me preguntas si volvería, diría que sí, pero solo porque la comida estaba rica y me encanta descubrir nuevos lugares, aunque el trato dejara un poco que desear.
Y ya para terminar, parece que el propietario del Restaurante La Era es un personaje un tanto especial. Me dicen que es un hombre que se comporta de manera bastante cortante y que no se siente muy a gusto con la atención al cliente. Les recomiendo que, si decide visitarlo, lleven mucha paciencia y una buena dosis de buen humor. A veces, el encanto del lugar compensa los pequeños inconvenientes, pero ya saben, cada visita puede ser una aventura... ¡suerte! ️
Qué tipo de ambiente se puede esperar en La Era
Y ya que estamos hablando de La Era, no puedo dejar de mencionar lo acogedor que es. Estuvimos allí cenando un día de agosto y, te lo juro, el comedor es pequeño pero tiene un ambiente que invita a querer quedarte. Con pocas mesas, siempre está a tope, así que si quieres asegurarte un sitio, reserva con antelación. ¡Ah y la atención! Es súper rápida y cercana, te sentirás como en casa en un plis. La primera vez que probé las cebollas rellenas de bonito y la tabla de embutido me volaron la cabeza, pero el pan, ¡no me hagas hablar del pan! Ese pan de pueblo tiene que ser un pecado.
El dueño, Tino, es una de esas personas que hacen que un lugar se sienta especial. Estar allí es como comer con amigos. La música de su equipazo Bose de fondo crea una atmósfera perfecta para relajarte después de un día de senderismo por Mampodre o Riaño. Aquí, no importa si llegas tarde después de una ruta, porque estos chicos siempre tienen una sonrisa y un plato caliente esperando por ti.
Y no solo es un sitio para comer, también tienen dos casas rurales increíbles si decides quedarte más tiempo. La calidad de la comida, el trato cercano y ese toque familiar que tiene el lugar son lo que realmente hace que quieras volver. Además, la vista desde allí es de locos, te quedarás embobado mirando las montañas. En resumen, el ambiente en La Era es acogedor, familiar y siempre lleno de buena música y comida rica. Es, sin duda, el mejor sitio para disfrutar con amigos, ya sea para comer, merendar o tomar algo después de un buen día de aventuras.
Es necesario hacer reservación para comer en el restaurante
Así que, ya sabes, la experiencia en Restaurante La Era fue bastante buena, aunque tuvimos un par de cosillas que mencionar. La comida casera estaba fantástica, y se notaba que todo estaba hecho con cariño. Las croquetas eran para llorar de lo buenas que estaban, y la brocheta de langostinos no se quedó atrás. Pero la única persona que estaba atendiendo todo el comedor parecía un poco desbordada, y eso hacía que el servicio se ralentizara un pelín. Nos pasó que no podíamos empezar a comer todos a la vez, ¡menudo embrollo! Pero, bueno, el lugar estaba tan bonito y acogedor que se nos pasó un poco.
Hablando de la decoración, déjame decirte que el comedor y el restaurante eran preciosos. La casa que alberga el restaurante estaba perfectamente restaurada, con un ambiente que te transportaba a otro tiempo. Era el sitio ideal para relajarse y disfrutar de una buena comida después de un día en la ruta en moto. Desde luego, si estás buscando un sitio que sea tanto bonito como cómodo, definitivamente te lo recomendaría. Y el personal, aunque un poco escaso en ese momento, eran muy amables y atentos, lo cual siempre suma puntos en cualquier experiencia.
En cuanto a la ubicación, está en Calle Real, 4 en Lario, León, y es un lugar que vale la pena visitar. A pesar de que a veces el servicio puede no ser el más ágil (es decir, si te toca un día con el restaurante lleno), la calidad de la comida compensa cualquier inconveniente. Únicamente si vas en un grupo grande, es posible que desees hacer una reservación, sobre todo si no quieres esperar un poco más de la cuenta. Pero, en general, ¡te lo recomiendo mucho! Es un sitio para picar algo, pasarla bien y, sobre todo, disfrutar de un buen rato.
Qué tipo de comida sirve el Restaurante La Era
Y ya que estamos, hablemos un poco de La Era, que está justo en Calle Real, 4 en ese pintoresco pueblito de Lario, León. Estuvimos cenando ahí un par de noches, y aunque la sopa que nos sirvieron estuvo bastante bien, el segundo plato ya fue otra historia. No sé si fue un mal día en la cocina, pero esos chipirones y cebollas rellenas de bonito parecían salidos de una lata. ¡Menuda decepción! La comida en general no parece ser su fuerte, y la verdad, me dio la sensación de que el restaurante se aprovecha un poco de la escasa competencia en la zona.
El servicio tampoco brilló por su amabilidad. Nos atendió un señor bastante desagradable, que parecía tener un mal día. ¡Nunca te deja pensar a la hora de pedir! Además, nos cobró unos 4,5 euros por un café y una tostada de mantequilla con mermelada, y ni siquiera nos permitió sentarnos. Tuvimos que hacer malabares en la barra. Si hay algo seguro es que no volvería por esa razón. En comparación con otros restaurantes de la zona, hay opciones mucho más agradables y con mejor trato.
Un fin de semana, fuimos a probar su menú de día, que costaba 15 euros. La comida estaba bien preparada y los platos volaban, aunque notamos que estaban desbordados de gente. La dueña nos explicó el menú a mil por hora, a tal punto que tuvimos que pedirle que lo repitiera. Sin embargo, a pesar del caos, la calidad-precio es buena y, al final, no está mal. Ah, y no hay problemas si llevas a los peques, que su trato con los niños es bastante bueno.
En cuanto a qué tipo de comida sirven en La Era, yo diría que te puedes esperar una variedad de platos típicos, como cocido o pescados a la plancha, aunque no tengo claro qué tan bien los ejecuten. Parece que van desde opciones tradicionales hasta platos de temporada. Pero, al menos por mi experiencia, creo que les falta un poco de cariño en la cocina. Si decides visitar, ¡buena suerte!
Cómo es el trato al cliente en La Era
La verdad, de La Era no se puede contar mucho para bien. La atención es pésima. Nos sentamos en una mesa del bar porque el comedor estaba ocupado por un bautizo, y luego nos sueltan el menú de carrerilla, como si estuviéramos en un concurso de velocidad. La camarera ni se molestó en darnos la carta, y cuando finalmente tomó nuestra orden, ya estaba pensando en a quién atender después en lugar de en nosotros. Lo peor fue el momento en que nos apuró para que dejáramos la mesa porque tenía gente esperando, como si no hubiéramos pagado por nuestro tiempo.
Cuando llegó la comida, no podemos decir que nos quedara un buen sabor de boca. Los huevos con gulas tenían cáscaras, la fideuá venía recalentada y con pelos, y el famoso 'cachopo' de pollo era un triste filete empanado, más pequeño que un puño. Y no hablemos de los postres; si pensabas que iba a haber algo sabroso, te llevas la sorpresa de unos plátanos verdes que se pueden comer en días, o un helado aplastado que parece más una broma que un postre. Por 15€ te esperas algo decente, ¡y aquí ni el café está incluido!
El ambiente, aunque es bonito y muy de pueblo, tiene un aire descuidado, con telarañas por ahí y el baño que dejaba mucho que desear. Te sientes un poco estafado, ya que el menú dice una cosa, pero al final la cuenta puede salir mucho más cara, y no te dan recibo, solo te 'cantan' cómo queda. Es difícil no sentir que te están engañando a la primera oportunidad que tienen. En resumen, aunque podrías salir con un plato rico si tienes suerte, el trato al cliente en La Era es bastante lamentable, así que mi consejo es que, si puedes, busques otro lugar, seguro lo agradeces.
El menú del restaurante cambia los domingos
Si estás buscando un sitio donde disfrutar de buena comida y un trato cercano, La Era es el lugar ideal. Tino y el resto del equipo hacen que te sientas como en casa desde el primer momento. La decoración rústica típica de Lario le da un encanto especial y, la verdad, es que se nota el cariño que le ponen a todo. ¿Y qué me dices de la comida? ¡Es casera y perfecta para esos días fríos o calurosos! Aunque hay días que puede que no todo encaje en los gustos de todos, la mayoría de las veces ¡está de cine!
Además, la comodidad del lugar es otro punto a favor. Si decides quedarte a dormir, las habitaciones están equipadas con todo lo necesario para que tu estancia sea de lo más agradable. El precio es muy bueno y de hecho, solo entre 10 y 20 € por persona, puedes darte un buen festín. Y para los que van en coche, hay muchas plazas libres de aparcamiento gratuito en la calle. Así que no hay excusas para no visitarlo.
Lo genial es que incluso si llegas sin reserva, como me pasó a mí, te atenderán con una sonrisa. Fui un poco tarde para comer y el lugar estaba lleno, pero no hubo problema, la amabilidad no faltó y la espera valió la pena. Todo esto hace que sea un sitio perfecto para ir en grupo o con la familia, ya que ¡hay espacio de sobra!
Y para los que se preguntan si el menú del restaurante cambia los domingos, generalmente no hay grandes variaciones. La mayoría de los platos son los mismos, aunque siempre hay alguna sorpresita para mantener las cosas interesantes. Esfuerzo y cariño en la cocina, eso es lo que te llevas con cada plato. Así que definitivamente, ¡será un lugar para repetir!








