Mesón La Peregrina

En Castrillo de los Polvazares, en la Calle Real, 52, el Mesón La Peregrina es una joyita que no te puedes perder si eres amante de la buena comida. Aquí, el famoso cocido maragato es el protagonista, preparado por unos genios en la cocina encabezados por Corín. Basta con leer las reseñas, donde cosechan una impresionante calificación de 4.8 sobre 5, para saber que estos chicos saben lo que hacen. Te aseguro que tanto los camareros como los cocineros te atenderán como si fueras de la familia.

Pero no solo la comida es destacable, el ambiente es una delicia. La sala es bonita y acogedora, y si tienes la suerte de ir en un día tranquilo, disfrutarás de jazz clásico y modernista de fondo, creando un entorno súper relajante. Es el lugar ideal para disfrutar de una buena charla mientras saboreas un plato que te transportará a otra dimensión. En resumen, si buscas calidad y un buen rato, Mesón La Peregrina es el sitio.

Dónde se encuentra el Mesón La Peregrina

¡Hola, amigos! Si alguna vez os encontráis por Castrillo de los Polvazares, tenéis que hacer una parada en el Mesón La Peregrina. Este lugar es una joyita donde disfrutar de un auténtico cocido maragato. ¡De verdad, es una experiencia que no os querréis perder! La atención del personal es fantástica, te hacen sentir como en casa desde el momento en que cruzas la puerta. ¡Totalmente 5 estrellas por la atención!

Nosotros fuimos un grupo de cinco, incluyendo a tres niños, y probamos diferentes tipos de cocido. Dos cocidos completos y unos medios para los más grandes. ¡El pequeño de dos años se lo pasó pipa! Por cierto, la cantidad es increíble; salimos rodando, pero no se siente pesado, ¡todo estaba delicioso! Además, el entorno es muy acogedor, y el ambiente es súper relajado. Como guinda del pastel, la atención con los niños es un plus: ¡son súper amables y simpáticos!

Y no hablemos del precio, que ronda entre 20 y 30 € por persona, que está genial para lo que ofrecen. Si pensáis que estáis en un bache con la comida de siempre, este cocido os va a sorprender. Si queréis ir en grupo, el lugar es perfecto porque tiene muchas plazas libres para aparcar y el acceso es cómodo —aunque el pueblo tiene sus piedras, ¡merece la pena!

Ahora, si os preguntáis ¿dónde está el Mesón La Peregrina? pues se encuentra en C. Real, 52, 24718 Castrillo de los Polvazares, León. Así que ya sabéis, ¡no dejéis de visitar este rincón tan especial! ¡Seguro que os vais con una sonrisa y la barriga llena!

Cuál es el plato principal que se destaca en el Mesón La Peregrina

¡Y hablando de comida, no puedo dejar de mencionar lo impresionante que es el cocido maragato en Mesón La Peregrina! La última vez que fui, quedé absolutamente fascinado. La forma en que sirven el menú es todo un ritual: primero llega la carne, luego los garbanzos con repollo, y para culminar, una deliciosa sopa. Cada bocado era como un abrazo calientito en el estómago. Realmente es de esos platos que te hacen sentir que estás en casa, pero con un toque gourmet.

La atención que recibimos fue, sin exagerar, impresionante. Desde el momento en que entramos, el personal fue súper amable y se esforzó por explicarnos cada detalle del menú. Me encantó cómo cada plato fue presentado con cariño, y la forma en que nos hablaron sobre el cocido maragato lo hacía aún más especial. Y después de un festín como ese, ¡no podían faltar unas natillas caseras para el postre! Eran tan cremosas que se deshacían en tu boca. Más tarde, el café de pota también fue un acierto y el chupito que nos ofrecieron cerró la experiencia de manera perfecta.

Y no se preocupen por el parking, porque hay un montón de plazas libres y el aparcamiento es totalmente gratuito. Así que no tendrás que dar mil vueltas para encontrar donde dejar el coche. ¡Eso siempre es un plus, ¿verdad?!

Si buscas una recomendación clara, no hay duda que el cocido maragato es el plato principal que se destaca en Mesón La Peregrina. De verdad, si eres amante de la buena comida y la cocina española, este sitio es una joya que no te puedes perder. Estás calentando motores para una gran comida, ¡y luego seguro querrás volver por más!

Quién es el encargado de la cocina en el mesón

¡De verdad, no puedo dejar de pensar en lo increíble que fue nuestra visita al Mesón La Peregrina! Desde que llegamos, el ambiente nos envolvió con ese aire acogedor de pueblo y una vibe tan única. Nos sentamos a la mesa y empezamos a charlar sobre lo que íbamos a pedir. Al final, no pudimos resistirnos al cocido maragato. ¡Fue una decisión acertadísima! El sabor se desbordaba en cada bocado, y esa mezcla de ingredientes locales realmente destaca. Cada plato era una obra maestra. Y qué decir de las natillas caseras, que todavía me están dando ganas de volver a probarlas. ¡Son de otro mundo!

El servicio fue impecable. No puedo dejar de mencionar lo amable y profesional del camarero. Nos explicó todo sobre el cocido, desde los deliciosos garbanzos hasta la forma en que se debe comer cada parte. Se notaba que le apasiona su trabajo y realmente se preocupa porque cada cliente se sienta a gusto. Todo, desde la comida hasta el trato, era de 5 estrellas. Sin duda me sentí como en casa, ¡y ni hablar de los chupitos que nos ofrecieron al final! Además, las bolsitas de garbanzos para cocinar en casa son un detallazo que jamás había visto.

Ahora, lo único que tengo en mente es volver, porque es una experiencia que no se puede describir con palabras. A pesar de llegar sin reserva y con el perro, fueron súper organizados. Y debes saber que hay aparcamiento gratuito a las afueras del pueblo, así que puedes dejar el coche y disfrutar de un paseo por esas calles tan pintorescas.

Y sobre quién está al mando de esa deliciosa cocina, el mérito indudablemente es del equipo del mesón, que trabaja con gran dedicación a la tradición maragata. Aunque no te puedo decir un nombre específico, queda claro que la pasión por la buena comida y el respeto por los ingredientes locales son su sello distintivo. ¡Tienes que vivirlo!

Qué calificación promedio tienen las reseñas del Mesón La Peregrina

La verdad es que Mesón La Peregrina es una auténtica joya en Castrillo de los Polvazares. Si no han ido aún, no sé a qué esperan. La calidad de la comida es increíble, y el trato que te dan es de 10. He ido varias veces y, honestamente, siempre salgo súper contenta. No se pueden perder su cocido maragato, que está para chuparse los dedos. Te lo digo, si no lo has probado, ¡tienes que hacerlo! Eso sí, recuerda reservar si planeas ir el fin de semana porque se llena, y es que la buena comida atrae a todos.

El ambiente es otro punto a favor; es un lugar acogedor donde te sientes como en casa. Desde que llegas, el servicio es de primera. Los camareros son súper amables y atentos, siempre pendientes de que no falte nada. Por si fuera poco, ofrecen unos postres caseros que son el broche perfecto para cualquier comida, y si me preguntas a mí, las natillas caseras son imprescindibles. Además, el café de puchero es toda una experiencia que no te puedes saltar.

Recuerdo una vez que llamamos a última hora de la mañana un domingo y, sorprendentemente, nos hicieron lugar sin dudarlo. Desde el primer vuelco del cocido hasta el último bocado, todo fue espectacular. Y no puedo dejar de mencionar la atención increíble de los chicos del comedor. Tuvieron hasta el detalle de darnos una bolsita de garbanzos extra para las niñas. ¡Eso es lo que yo llamo un buen servicio!

Sin duda, si quieres disfrutar de la gastronomía tradicional en un lugar con buen ambiente, este es el sitio. La calificación promedio de las reseñas del Mesón La Peregrina es de 5 estrellas, lo que habla por sí solo. Así que no se lo piensen más, ¡vayan y disfruten de una experiencia única!

Qué tipo de atención brindan los empleados del Mesón La Peregrina

Y ya hablando del Mesón La Peregrina, ¡qué joyita encontré! Desde que entras a Castrillo de los Polvazares, el lugar tiene un auténtico encanto que te atrapa. El restaurante es tranquilo y acogedor, ideal para disfrutar de buena comida sin estrés. Si tienes la suerte de probar su cocido maragato, te aseguro que no te va a decepcionar. Todo estaba súper rico y, la verdad, es que las raciones son bastante generosas.

Lo mejor de todo es que, además del gran sabor de los platos, el trato del personal es genial. Fue como estar en casa, con un servicio no solo atento, sino también muy amigable. Te hacen sentir bienvenido desde el primer momento. En mi caso, la experiencia fue tan buena que salí pensando en volver con la familia. Y ojo, ¡las natillas caseras son un must que no te puedes perder! Esa es la manera perfecta de cerrar con broche de oro.

Si hablamos de precios, la relación calidad-precio es bastante buena: 20-30€ por persona y saldrás más que satisfecho. Además, ellos no escatiman en los detalles; los postres, cafés y licores están incluidos, ¡un auténtico placer! El ambiente era simplemente genial. Aparte, el sitio tiene un detalle que no se me olvida: con tanto encanto y cosas curiosas, ¡es perfecto para un buen paseo después de la comida!

Y en cuanto a la atención de los empleados de Mesón La Peregrina, ¿qué te puedo decir? Ellos brindan un servicio que realmente destaca; son muy amables y siempre están disponibles para asegurarse de que tengas todo lo que necesitas. Desde el servicio hasta la comida, se nota el esfuerzo en cada momento. Así que no dudes en hacerles una visita, ¡no te arrepentirás!

Cómo es el ambiente del restaurante

Y ya que hablamos del Mesón La Peregrina, déjame contarte sobre la experiencia que vivimos. Este lugar tiene un encanto especial, aunque dentro podría mejorar un poco en la iluminación de las esquinas. Aun así, el ambiente es muy acogedor y familiar. La decoración es rústica y te hace sentir como en casa, perfecto para disfrutar de una buena comida con amigos o familia. Además, el acceso es fácil, ya que hay muchas plazas de aparcamiento gratuito justo en la entrada, así que no te preocupes por eso.

La atención fue realmente espectacular, casi podríamos decir que de 12 sobre 10. Desde el primer momento, el personal fue extremadamente amable y cordial. Nos atendieron rápido y siempre estaban atentos para ver si necesitábamos algo más. Me encantó que, si pedías el famoso cocido maragato, te daban la opción de repetir. ¡Y vaya que si repetimos! Las raciones son generosas, así que no te vas a quedar con hambre. Además, si sobra algo, tienen tapers disponibles para que te lleves lo que no puedas acabar.

Hablando de la comida, todo estaba a otro nivel. El cocido maragato es simplemente para chuparse los dedos, acompañado de un buen pan de pueblo y esa tomata de entrante que te deja con ganas de más. Y ni hablar de los postres; tanto las natillas caseras como la tarta de queso son una delicia. Y todo esto, por solo 25 euros por persona, considerando la calidad y cantidad que ofrecen, es una relación calidad-precio imbatible.

En cuanto al ambiente, es un sitio ideal para ir en familia. Tienen tronas para los más pequeños y platos adaptados para ellos. Así que, si buscas un lugar donde comer bien y disfrutar del tiempo con tus seres queridos, te aseguro que este es el sitio perfecto. Sin duda, repetiremos muy pronto. ¡No te lo puedes perder!

Qué tipo de música se puede escuchar en el Mesón La Peregrina

Bueno, ya te contaré más sobre Mesón La Peregrina, que realmente se lleva mis cinco estrellas sin dudarlo. Recuerdo que mi visita fue la primera vez que probé el cocido maragato y, aunque no puedo compararlo con otros, mi paladar y la amabilidad del personal me han dejado impresionado. Desde que entras, te envuelve un ambiente acogedor, con empleados que parecen disfrutar tanto como tú de la comida. Eso siempre suma, ¿no crees?

Lo que me flipa del cocido maragato es que se sirve al revés. Arrancamos con una ensalada de tomate que, a pesar de ser febrero, estaba riquísima. Luego vino el primer vuelco con las carnes: ¡siete tipos diferentes! Y no sé tú, pero yo disfruté muchísimo viendo esa bandeja colmada, aunque tampoco hay que tirar nada; el camarero fue claro en que si hay alguna carne que te encante, puedes repetir. ¡Eso es lo que yo llamo un buen servicio! Y miedo me da lo que vino después, porque el segundo vuelco estaba ¡estupendo! Berza y garbanzos a la altura, aunque quizás me descuidé un poco con las raciones, porque no pude ni con la mitad. Pero bueno, tampoco está mal quedarse un poco satisfecho, ¿verdad?

Ya para terminar la experiencia, la sopa de fideos fue todo un abrazo en forma de comida; perfecta para esos días de frío intenso. Y, por supuesto, el toque dulce vino en forma de natillas caseras con galleta, que me dejaron con una amplia sonrisa… y ¡sin hambre durante el resto del día! Recuerda que el menú es de 22€, sin incluir bebidas, pero tampoco son muy caras. Unas botellitas de orujo y de crema de café fueron el broche perfecto para esa experiencia culinaria.

Y hablando de ambiente, la música que puedes escuchar en Mesón La Peregrina no es un detalle menor; cuando estuve, sonaba esa música suave y tradicional que te hace sentir en casa, mezclando toques regionales que complementan perfectamente la comida. Imagina comer un delicioso cocido y, al mismo tiempo, disfrutar de melodías que evocan la cultura de la tierra. ¿Qué más quieres? Un planazo, sin duda alguna.

Es recomendable hacer una reserva para cenar en el Mesón La Peregrina

Y si hablamos del Cocido Maragato, no hay duda de que es el plato estrella del Mesón La Peregrina. La primera vez que lo probé, no podía creer lo satisfactorio que resultó: un plato único que realmente llena. A todos nos gusta ir a un lugar donde se puede disfrutar de comida deliciosa y, la verdad, este sitio lo logra con creces. Si te gusta la carne bien hecha, no te decepcionará este cocido. El tamaño de las porciones es generoso, seguro que saldrás más que satisfecho.

Además, el ambiente es súper acogedor. Es uno de esos lugares donde te sientes cómodo desde el primer momento. Nos recibió un camarero que era todo amabilidad; de esas personas que te hacen sentir como en casa. Aunque había poca gente, siempre estuvo pendiente de nosotros, listísimo para atender cualquier necesidad. Como experiencia de servicio, ¡es un 5 estrellas! Y eso se suma a que no hay nada más agradable que comer con esa atención en un ambiente cálido.

Hablando de precios, se ajusta perfectamente a lo que uno busca. Comimos de maravilla por un precio muy razonable, alrededor de 24€ para dos personas incluyendo bebidas. Y si tenéis un perrito, ¡no os preocupéis! Tuvimos la suerte de estar ahí un día lluvioso y nos dejaron llevarlo dentro. Eso sí, si planeáis ir, es buena idea aparcar al principio del pueblo, ya que el tráfico está restringido, pero no hay problema, porque el aparque en la calle es gratuito.

Ahora, en cuanto a la pregunta que todos se hacen: ¿es recomendable hacer una reserva para cenar en el Mesón La Peregrina? Definitivamente sí. Si queréis disfrutar de su famoso Cocido Maragato y aseguraros un buen sitio, lo mejor es llamar y reservar. No querréis quedaros sin mesa, especialmente en los días más concurridos, ya que este lugar se ha ganado su reputación a pulso. ¡Así que ya sabéis, no dejéis de visitarlo!

Fotografías Mesón La Peregrina