Casa Molleda

Casa Molleda

Casa Molleda es el lugar ideal si buscas un refugio acogedor en pleno Barrio Pejanda. Desde 1928, esta posada familiar no solo ofrece alojamiento, sino también una experiencia culinaria única con su comida tradicional de montaña. Imagina disfrutar de un desayuno incluido y luego, después de un día explorando el hermoso entorno, regresar y saborear un buen plato en su restaurante. El ambiente es cálido y el personal, increíblemente amable, te hará sentir como en casa.

Aparte de sus nueve habitaciones dobles equipadas con todo lo necesario (baño, TV y calefacción), Casa Molleda cuenta con un salón común y una terraza donde puedes relajarte. Estás a solo unos pasos de rutas junto al río y a un corto trayecto del impresionante Parque Natural Fuentes Carrionas y de otras atracciones locales. Con wifi gratis y recepción 24 horas, no hay duda de que encontrarás lo que necesitas para disfrutar de tu escapada en Cantabria. ¡Definitivamente un lugar que no te querrás perder!

Casa Molleda

4,6
539Reseñas
Fotos
Barrio Pejanda, 9, 39557 Pejanda, Cantabria
942 72 90 08

Mapa Ubicación Casa Molleda

Dónde está ubicada Casa Molleda

¡Hey, grupo! Si hay un lugar al que siempre vuelvo y nunca me cansaré de recomendar, ese es Casa Molleda en Barrio Pejanda, 9, 39557 Pejanda, Cantabria. Este sitio es un auténtico tesoro escondido en el valle de Polaciones, y qué decir de la variada oferta hostelera que tienen. Puedes elegir entre casas rurales en San Mamés, apartamentos rurales, o una acogedora posada en Pejanda. Y no solo eso, ¡su bar y restaurante son de los de toda la vida!

Hablando del restaurante, la comida es deliciosa. Ofrecen productos de la zona y esas riquísimas carnes de ganado propio que hacen que cada comida sea una explosión de sabor. He probado casi todas las opciones de alojamiento y los menús, tanto en comidas como en cenas, y puedo decir que el trato de los hermanos Molleda es excepcional. Son unos verdaderos dinamizadores de la zona y se nota que les apasiona lo que hacen. ¡Sin duda, es un lugar para volver siempre!

El ambiente en Casa Molleda es súper tranquilo. Si buscas un hotel de montaña donde desconectar, este es el lugar ideal. Eso sí, las camas no son las más cómodas que he probado, pero el servicio es excelente y el desayuno, oh, el desayuno... ¡tostadas frescas, mermelada casera y café con leche que te dejará con ganas de más! La ubicación es ideal para quienes quieran perderse en la naturaleza, aunque sí que hay que preparar el estómago para las curvas del camino. Pero, a veces, todo lo que necesitas es un buen café con un postre casero después de una larga jornada de rutas.

Y si te preguntas, "¿dónde está ubicada Casa Molleda?", pues está en Barrio Pejanda, 9, 39557 Pejanda, Cantabria. Es un lugar que te invita a relajarte y disfrutar del entorno. Si buscas un sitio cómodo para una escapada en grupo o familia, ¡no busques más! ¡Nos vemos en la próxima aventura!

Qué tipo de alojamiento ofrece Casa Molleda

Y después de unos días en Casa Molleda, ¡vaya maravilla! La Selección se llevó el título!!! y celebrarlo aquí fue de lo más emocionante. Isabel y Quinito, junto con su familia, nos hicieron sentir como en casa. Aunque estamos a kilómetros de distancia, no puedo dejar de recordar con cariño lo bien que nos cuidaron. Si tienes la oportunidad de ir, te aseguro que será una experiencia fantástica. De verdad, ¡todo fue perfecto! Nos acomodamos, descansamos y comimos como reyes. La atención que recibimos fue de 10, y eso cuenta muchísimo.

Una de las cosas que más me gustó fue la tranquila terraza del bar, perfecta para relajarse después de un día explorando. Apenas pasaban coches, lo que es un auténtico lujo. Con un poco de suerte, puedes disfrutar de unas rabitas, huevos rotos o torreznos que son para morir. Y aunque las raciones son ricas, no son muy baratas, pero vaya, ¡cada bocado lo vale! La verdad es que si buscas un lugar donde comer en paz, este es el sitio.

Por cierto, si eres amante de las rutas, después de esa caminata desde la Fuente del Chivo, nos atendieron fenomenal. Nos prepararon una cena rica y un desayuno que nos dejó listos para la siguiente aventura. Los dueños son súper atentos y están pendientes de todo. ¡Un detalle que siempre se agradece! Ah, y vuelvo a recordar el entorno: un pueblo de Cantabria que es un encanto, con vistas increíbles y un ambiente de lo más acogedor.

Ya hemos repetido estancia varias veces, la primera fue en 2020 y, sinceramente, creo que nunca nos cansaremos de volver. La casa es cómoda y está limpia, ¡y eso es fundamental! La comida casera es un 10 total, con porciones generosas y una relación calidad-precio insuperable, además de un trato muy familiar. Y para los que viajan con niños, este lugar es ideal. Ya sabes, si buscas un alojamiento en Casa Molleda, encuentras habitaciones acogedoras, un servicio excepcional, y además, ofrecen desayuno, comida, cena y hasta bar. ¡Sin duda, vale la pena visitarlo!

Qué tipo de comida se puede disfrutar en Casa Molleda

Si buscas un lugar para desconectar del ajetreo diario, Casa Molleda es una joyita en el corazón de Cantabria. Este lugar está en Barrio Pejanda, 9, y la verdad es que cada rincón despierta una vibra acogedora. Cuando llegas, lo primero que notas es el trato tan amable que ofrecen. Todos son super atentos y te hacen sentir como en casa desde el momento en que cruzas la puerta.

Ahora, hablemos de la comida, que es, sin duda, uno de los puntos fuertes de este sitio. Si hay algo que tienes que probar, es la ternera en salsa. Te prometo que es la mejor que he comido; ¡me ha encantado! Y lo mejor es que hay variedad en el menú, todo bien casero y con un toque especial que te deja con ganas de más. Y eso sin contar con que, al final de la cena, no te puedes ir sin un pacharán de la zona; es un remate perfecto que no te dejará indiferente.

Además, si te gusta disfrutar de una buena cerveza, no olvides probar la cerveza artesana que hacen aquí. Está buenísima y, para los que amamos la buena bebida, es un plus que no se puede ignorar. Y claro, como este lugar es tan ideal para viajes en grupo, es perfecto para esas escapadas con amigos o con la familia. De hecho, hay veces que organizan conciertos y exposiciones, lo que le da un aire muy dinámico y entretenido al valle.

Finalmente, ¿y qué tipo de comida puedes disfrutar en Casa Molleda? Pues, además de la famosa ternera en salsa, encontrarás platos caseros deliciosos que te harán sentir como si estuvieras en la cocina de tu abuela. La diversidad de su menú hace que, sin importar el día que elijas, siempre haya algo que te atrape y te deje con una sonrisa. En resumen, ¡definitivamente merece la pena visitarlo!

Está incluido el desayuno en la estancia en Casa Molleda

Y hablando de Casa Molleda, ¡qué lugar tan acogedor! Si estás pensando en planear una escapada en grupo con amigos, definitivamente deberías considerar este sitio. Las habitaciones son impecables, limpias y súper cómodas. La tranquilidad del lugar hace que te sientas como en casa. Además, el trato de Isabel y su equipo es simplemente excepcional; se nota que cuidan a sus huéspedes como si fueran parte de la familia.

Y no me puedo olvidar de la comida, ¡es un festín para los sentidos! Desde el menú del día por solo 14€, donde puedes disfrutar de platos típicos como el cocido montañés o los huevos con patatas y borono, hasta esos inolvidables frisuelos en el desayuno. ¡No quiero exagerar, pero te lo juro, esos frisuelos son otra cosa! Y ni hablemos de los postres; el arroz con leche y la tarta de la abuela son un final perfecto para cualquier comida. Por lo que valen, se siente como un auténtico chollo.

Cuando estuvimos allí, también prepararon unos bocadillos para llevarnos al día siguiente, algo que nos vino de maravilla para continuar con nuestras andanzas por el Valle de Polaciones. La naturaleza en esa zona es asombrosa, perfectísima para hacer senderismo y tomar mil fotos.

Y para responder a la pregunta que muchos se hacen: sí, el desayuno está incluido en la estancia en Casa Molleda. Te aseguro que con la variedad que ofrecen, empezar el día ahí es como un regalo. Volveremos sin lugar a dudas y, si algún día dudas de dónde alojarte, ¡ya sabes que Casa Molleda es la mejor opción!

Cuántas habitaciones dobles tiene Casa Molleda

La verdad es que el camino hacia Casa Molleda es una experiencia en sí misma. Te vas a quedar extasiado con esos paisajes que parecen sacados de un cuento. Una vez que llegas, la primera impresión es que todo está en perfectas condiciones. Las habitaciones están super limpias y la cama… ¡vaya comodidad! Es como un abrazo después de un largo día. Y ya ni hablemos de la cena. ¡Estaba riquísima! Isabel, la dueña, es un encanto. Siempre está pendiente de todo y te hace sentir como en casa; definitivamente, una de esas personas que te dejan una sonrisa.

Hablando de la comida, si eres un amante de la buena gastronomía, te va a encantar. Mi familia y yo nos llevamos una grata sorpresa con el cocido montañés, que estaba increíble. Y el estofado de cordero, ¡ni te cuento! Y, por si fuera poco, los postres son todo un acierto: tanto la natilla como la tarta de la abuela son una delicia. Todo casero, bien elaborado, y saben a hogar. No hay nada como disfrutar de una buena comida en familia, especialmente cuando hay 11 de vosotros en la mesa y todos están encantados con lo que hay en el plato. Además, la relación calidad-precio es un 10, ¡no se puede pedir más!

No puedo dejar de mencionar la atención del personal. Son amabilísimos y pendientes de cada detalle. Desde que llegamos, nos hicieron sentir que estábamos en un lugar especial. La habitación es sencilla pero acogedora, y lo que más nos llamó la atención fueron esos desayunos con tortitas caseras que te hacen sentir en el cielo. Y aunque había unas hormiguitas en el baño, lo demás lo compensó con creces. Sin embargo, es un lugar que definitivamente me encantaría volver a visitar y recomendar a mis amigos.

Por cierto, si os estáis preguntando cuántas habitaciones dobles tiene Casa Molleda, puedo decirte que tienen un par. Perfecto para escaparte con la familia o un grupo de amigos. Así que cuando te animes a visitarlos, no dudes en hacer tu reserva. ¡No te vas a arrepentir!

Qué comodidades están disponibles en las habitaciones de Casa Molleda

¡Y claro, hablando de Casa Molleda, me doy cuenta de que está llena de encanto! Estuvimos allí tres noches y, en general, la experiencia fue bastante buena. La habitación era amplia y la cama muy cómoda, aunque tengo que admitir que la almohada era un poco insufrible. Tuvimos que pedir otra, porque la que había era tan fina y blanda que parecía que no teníamos nada. Pero, fuera de eso, el lugar tiene un ambiente único. ¡Es como estar en casa!

Si viajas en moto, es un buen sitio para parar a comer. La comida típica de la zona es un verdadero placer, y de verdad que le dan ese toque especial que solo se encuentra en lo casero. Recuerdo que nos trataron de maravilla; los dueños son super amables y hacen que te sientas bienvenido desde el primer momento. Por unos 12 euros, cenamos un menú que parecía sacado directamente de la cocina de la abuela. ¡Todo un lujo!

Me encantó la relación calidad-precio. La casa está impecable y el desayuno es un lujo: puedes pedir lo que quieras. De hecho, me dio pena no haber podido quedarme a comer una de esas delicias caseras que vi en la carta, así que, sin duda, tengo que volver. En este rincón tranquilo de Cantabria, el barrio de Pejanda es perfecto para desconectar del bullicio.

Sobre las comodidades de las habitaciones, bueno, son bastante completas. Tienes televisión para relajarte después de un día de exploración, y no pasa frío, a pesar de estar en alta montaña. Las habitaciones están limpias y bien acondicionadas, aunque hay margen para mejorar un poco los colchones. El servicio es excelente, con unos dueños que son simplemente encantadores y te hacen sentir como en casa. No se puede pedir mucho más, ¿verdad?

Hay algún espacio común donde los huéspedes puedan relajarse

Y hablando de Casa Molleda, qué lugar tan acogedor y encantador. Solo he tenido la oportunidad de ir a comer, pero la experiencia fue de 10. Desde la buena comida hasta el servicio inmejorable, me dejó con ganas de volver. Puedes llegar de la ruta a la hora que sea y ahí te tienen listo un plato sabroso, que eso es lo que más se valora cuando has estado explorando. Lo que me encanta es que el ambiente es muy familiar y con un toque casero que te hace sentir como en casa.

Una pareja de Bilbao me contó que se quedaron solo una noche, pero se marcharon con pena de no haber podido disfrutar más. Dicen que el sitio tiene un encanto singular y que se duerme como un angelito, gracias a la tranquilidad del lugar. Las habitaciones, aunque rústicas, son acogedoras y tienen ese ambiente que solo te da un lugar bien cuidado. ¡Y no hablemos de la comida! Platos abundantes y deliciosos que te hacen pensar en tu próxima visita.

Por otro lado, hay quienes han comentado que las habitaciones son un poco sencillas y podrían beneficiarse de una actualización. Pero, ¿quién necesita lujos cuando la comida y el servicio son tan buenos? Desde cenas abundantes hasta un desayuno que te deja listo para conquistar las montañas cercanas, eso es lo importante. La comida casera es, sin duda, el punto fuerte de Casa Molleda.

Y para responder a la pregunta que todos se hacen: ¿hay algún espacio común donde los huéspedes puedan relajarse? Absolutamente. La atmósfera compartida en Casa Molleda es perfecta para desconectar y conocer a otros viajeros. La gente que trabaja allí es tan agradable que realmente te hacen sentir como si estuvieras en casa, así que puedes estar seguro de que encontrarás un rinconcito para relajarte y compartir anécdotas de viajero. ¡Totalmente recomendable!

Fotografías Casa Molleda

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